¡El sistema es la crisis!
La sociedad se tambalea de crisis en crisis. Pero en lugar de reaccionar adecuadamente a estas crisis, los gobernantes se niegan a hacer un progreso real y se aferran al sistema anterior de explotación. ¡Es precisamente este sistema capitalista el que provoca las crisis económicas, ecológicas y sociales a nivel mundial!
En el caso de la crisis climática, se enfrentan dos sistemas que decidirán cómo será nuestro futuro: El sistema económico dominante basado en la maximización de beneficios y el crecimiento constante. Y el sistema de la Tierra, de cuyos recursos finitos y ecosistemas intactos depende la humanidad. Ambos sistemas no son compatibles entre sí.
Una gestión de crisis basada en mantener el sistema capitalista funcionando mientras se ignora cualquier conocimiento científico está destinada al fracaso.
¡La crisis tiene un sistema!
El plan del gobierno para resolver la actual „crisis energética“ con gas natural licuado (GNL) importado sigue la tradición de un „negocio como usal“ fósil y neocolonial. Se aceptan los efectos devastadores del recalentamiento de la crisis climática, así como el sufrimiento de las personas directamente afectadas por la producción de gas. Mientras que el gas líquido se fractura hidráulicamente en el Sur Global y se destruyen los medios de subsistencia, en el Norte Global se utiliza para mantener en marcha la acumulación de capital. El sistema se basa en este „sigue así sin importar el precio“. Y eso es exactamente lo que hay que detener.
En otras palabras: si precisamente intervinimos en este proceso continuamente destructivo, es posible imaginar otro mundo. En lugar de externalizar las crisis a „otros“ espacios y tiempos, se puede implementar un cambio de sistema. Todos sabemos que se necesita un cambio social real y radical.
Ven a Hamburgo del 9 al 15 de agosto para los „System Change Camp & Action Days“
La ciudad de Hamburgo ahora también espera poder beneficiarse enormemente del negocio destructivo con el gas fracturado a través del puerto y la construcción de terminales de GNL. Queremos asegurarnos de que esto no pase desapercibido y dejar claro que no estamos interesados en este tipo de ganancias.
Unámonos y pensemos juntos en nuestras luchas porque, al igual que las diferentes crisis, en última instancia tienen la misma causa raíz. Usemos nuestro potencial y abramos el camino hacia un mundo más justo, no a pesar, sino precisamente por nuestras diferentes perspectivas y estrategias.
Sabemos a dónde queremos ir: Queremos justicia social, económica y ecológica para todos. Y eso requiere un cambio de sistema. Nuestra lucha por un mundo justo es anticapitalista, antirracista, anticapacitista, queer-feminista, antifascista y antimilitarista. Nos oponemos al antisemitismo ya todas las formas de explotación y opresión.
Reunimos diferentes perspectivas y luchas para aprender unos de otros.
Es por eso que nos gustaría invitar explícitamente a todas las personas cuyas voces hasta ahora han sido demasiado silenciosas o no se han escuchado en absoluto en el discurso político a involucrarse en el contenido del campamento y participar en voz alta en las actividades conjuntas. Esta es la única forma en que podemos crear un clima de justicia y solidaridad.
cambio de sistema ¡Ahora!
